MUNAD

Bowdoin Sketches (2016)

Esta es una composición para sonidos de la cuerda frotada. Hay dos tipos de excitación en instrumentos musicales, una es la cuerda frotada (con un arco), que es la familia de los violines et-simile, y la otra es la cuerda pulsada que en la familia de las guitarras.
El modelo físico de la cuerda frotada que utiliza el artista en la obra es un algoritmo de computador, desarrollado por él mismo, para lograr este sonido a partir de parámetros y medidas de un violín original.

Un conjunto que consiste en un modelo físico, análisis de LPC y síntesis de modelado espectral además de síntesis granular contiene una gama de timbres utilizados para esta composición. Atonalidad con grupos de clases de tono sobre líneas paralelas y tres intervalos de superposición mezcla los espectros. La estructura musical sigue una especie de patrón de laberinto hasta los callejones sin salida a través de las líneas sinuosas donde cada segmento es parte de un episodio. Obsérvese la simetría de la estructura. La disposición espacial se enmarca en el paradigma del paisaje por el cual las fuentes estáticas del sonido se dispersan en el plano de 360 ​​grados. Algunas expresiones sugieren el movimiento de la fuente de sonido a lo largo de los caminos.

Marimonda Sketches (2007)

Esta obra es un esquema, por no decir dibujo, aludiendo a la práctica del arte con lo sonoro. La imagen auditiva es proyectada a través de un par de transductores suspendidos o dispuestos en el espacio. Puesto que es una imagen estereofónica, su percepción es tridimensional. Los trazos del esquema son logrados por osciladores, generadores de armónicos, que al escucharse se agrupan en formas o patrones que pueden sonar familiares al oyente. Estos son como delineamientos alrededor de un supuesto centro de gravedad que influye en la tensión del movimiento. Las figuras que sugieren los sonidos de este esquema, son las de la danza de las marimondas en individual o en conjunto. No hay sonidos reales, esta obra ha sido realizada algorítmicamente en el lenguaje de programación Scheme con Snd. La electrónica y el artefacto de proyección también son realizados por el compositor. Lamarimonda es uno de los personajes del Carnaval de Barranquilla.

Pare conocer más acerca del trabajo de Juan Reyes pueden visitar su página personal por medio del siguiente enlace:

https://ccrma.stanford.edu/~juanig/ 

Texto curatorial

Por Ricardo Hernández

Artista visual

“Hay que romper este círculo restringido de sonidos puros y conquistar la variedad infinita de los sonidos-ruidos.” Manifiesto Futurista, 1913.

El denominado “arte de los nuevos medios” orienta su indagación hacia la novedad como tal (nuevos modelos culturales, nuevas tecnologías, nuevos aspectos de cuestiones políticas anteriores) y encuentra sus raíces estéticas y conceptuales en la primera mitad del siglo XX, donde movimientos de vanguardia como el Dadá y el Futurismo permitieron que las fronteras entre las diferentes disciplinas artísticas se hicieran difusas.

El movimiento dadaísta comenzaría a experimentar con técnicas y formas de ejecución de ideas consideradas en ese momento como radicalmente nuevas, muchas de las cuales reaparecerían más adelante en la práctica artística, a lo largo del siglo XX, de maneras encubiertas.

Estas vanguardias reaccionaron a fenómenos como la industrialización de la guerra, o el auge de la reproducción mecánica de imágenes y textos. El denominado “arte de los nuevos medios” puede comprenderse entonces como una “respuesta a la revolución de las tecnologías de la información y la digitalización de diversos modelos culturales” (Grosenick, Tribe, & Reena, 2006).

En la primera mitad del Siglo XX los artistas comenzaron a hacer uso de aparatos de transmisión electrónica, Filippo Tommaso Marinetti, en la década de 1930, ya se encontraba reconociendo la importancia de la radio, como una voz que permitía llegar a un público de masas, superando las distancias y las barreras del lugar tradicional de exhibición de arte. Gracias a este tipo de planteamientos, desde esos tiempos el ruido se convirtió en un elemento expresivo, y como lo sostendrían varios de sus representantes, los sonidos de la vida cotidiana se habrían liberado. Desde entonces, el denominado “arte sonoro” ha encontrado vías para su desarrollo, en momentos alternas al circuito de las artes visuales y de la música. Actualmente la conciencia sobre el sonido como forma de expresión a avanzado considerablemente gracias al trabajo de artistas polifacéticos como John Cage y a movimientos de vanguardia como Fluxus, que por medio de diferentes estrategias, de igual manera radicales en su tiempo, llevaron al límite el paradigma de Arte = Vida.

He aquí las 6 familias de ruidos de la orquesta futurista que pronto llevaremos a la práctica, mecánicamente:

En esta lista hemos incluido los más característicos de entre los ruidos fundamentales; los demás no son sino las asociaciones y las combinaciones de éstos. Los movimientos rítmicos de un ruido son infinitos. Existe siempre, como para el tono, un ritmo predominante, pero en torno a éste, también se pueden percibir otros numerosos ritmos secundarios.

Manifiesto Futurista, 1913

Como parte del planteamiento del arte sonoro, y como tal de la experimentación sonora, el MUNAD en esta oportunidad exhibe la obra del artista, compositor e investigador Juan Reyes (Barranquilla, Colombia, 1962), quien se graduó en Matemáticas y Composición Musical en la Universidad de Tampa, Estados Unidos. También estudió música por computadora con John Chowning, Perry Cook y Chris Chafe en el Center for Computer Research in Music and Acoustics (CCRMA) de Stanford University. Reyes ha sido profesor de Música y Arte en Universidades Nacional, de Caldas, de de Antioquia y en la Universidad de Los Andes, en Santafé de Bogotá, Colombia. Sus principales campos de investigación, desarrollados en conjunto con el Colegio de Ingeniería de la Universidad de Los Andes, abarcan la síntesis digital de sonido y el procesamiento digital de señales, el modelado físico, el modelado espectral, la composición algorítmica, y últimamente, el modelado de expresión. Desde hace mas de dos décadas Reyes viene promoviendo la música por computadora en Colombia. En 1989 fue co-organizador del Festival Internacional de Música Contemporánea de Bogotá, el cual se lleva a cabo cada dos años. Entre 1993 y 1997 organizó la primera, segunda y tercera serie de de conciertos acusmáticos de Bogotá. Mas recientemente ha realizado proyectos de expresión con telepresencia y telemática entrelazando en Colombia a la Universidad de Antioquia, Autónoma del Caribe, Icesi, Universidad del Valle y Universidad de Caldas. Con el exterior ha logrado performances y conciertos con La Universidad de Sao Paulo, la Universidad de Michigan, Stanford, Universidad de California, Rensselaer y otras.

En este caso se exhiben dos obras suyas, precisamente de bocetos relacionados con espacios, con lugares recorridos por el artista, analizados para la creación de sonidos que obedecen a una especie de patrón de laberinto que emula las intersecciones y caminos de dichos lugares, extrayendo momentos sonoros, transformándolos por medio de su edición y componiéndolos en piezas de sonido que hacen referencia a un paisaje tridimensional, inicialmente en su pieza “Bowdoin sketches” (2016) como parte de un reconocimiento del espacio por medio del movimiento y posteriormente en su obra “Marimonda sketches” (2007) como modo de apropiación e interpretación del recorrido y fuerza de la danza de las marimondas en el Carnaval de Barranquilla.

Revisando los antecedentes de la práctica artística con el sonido-ruido y posteriormente la obra de Juan Reyes podemos ver que el arte sonoro necesita encontrarse en un cambio permanente y en un proceso auto-cuestionamiento, esto con la intención de no ser definido o encasillado únicamente en parámetros técnicos o efectistas escuetos, sino como parte de un proceso continuo de experimentación alrededor de diferentes problemáticas. La experimentación sonora es un medio amorfo, alternativo y complementario a las artes visuales y musicales, indefinido en sus límites y propicio para la ruptura de paradigmas estéticos y de exhibición, como parte del arte actual, una herramienta de gran potencial para la expresión y el análisis del territorio que habitamos.

Bibliografía
Ashton D., Celant G. (1981) Soundings. Neuberger Museum.
Chion, M. (1999). El sonido (1st ed.). Barcelona: Paidós.
Grosenick, U., Tribe, M., & Reena, J. (2006). Arte y nuevas tecnologias (1st ed.). Köln [u.a.]: Taschen.