La naturaleza contiene una extraordinaria diversidad de formas, que invita al ser humano a apreciar la belleza a partir de varias manifestaciones de la mirada, algunas por ejemplo, observan la inmensidad de un paisaje, otras, se perfilan hacia las particularidades que brinda la diferencia de tamaños o texturas como la de un árbol o una hoja. Es común, que al visitar o habitar un lugar, surja una fijación por el paisaje, sobre todo en el ámbito geográfico que ofrece el entorno rural de Boyacá. 

Existe una contemplación inconsciente de lo global cuando se realiza una observación consciente de lo singular, lo extraño, lo oculto que brinda los paisajes naturales, comparando de manera alterna la inmensidad del tiempo y el espacio en los fractales que se replican en los ecosistemas.  Simultáneamente, se observa también, la huella que deja el habitante en el lugar, eso que construye, dejando una marca en el espacio.

El ejercicio de mirar y observar permite descubrir y comprender el mundo, es en primera instancia la pasión de investigar. A lo largo de la historia, el ser humano ha dejado rastro de su existencia, por medio de sus vestigios, con la manipulación de los materiales y entornos para crear tejidos significantes.  La armonía y dinamismo en las composiciones, representa  los ecosistemas, aquel equilibrio necesario para la supervivencia de las especies, de cómo una vida hace parte de otra y como el fin de un ser vivo es el origen de uno nuevo. Las ilustraciones muestran parte de esa estética de los elementos que componen el espacio de la vereda Providencia-Tinjacá, entre las estructuras creadas por el hombre y las de la naturaleza.

Las obras se relacionan con el proyecto de investigación creación «Mediación artística y prácticas populares en cultura ambiental “con SGI: 2883 buscando aportar a las relaciones que se establecen en las prácticas de apropiación del ambiente, entendiendo que se establece como un entorno cercano en el cual el ser humano y otras especies conviven, para desarrollar y potenciar la sensibilidad y la correspondencia en las actividades cotidianas de estos espacios mucho más rurales en el contexto boyacense.

La ilustraciones buscan resaltar la importancia de las especies de fauna silvestres que se encuentran en el municipio de Tinjacá, en la zona provincial, lo que contribuye al reconocimiento cultural del cuidado por los animales y una invitación a fortalecer las  relaciones de convivencia ecológica desde la creación artística, pues en la mediación se entiende que el arte, en especial estas ilustraciones que surgen de las artes visuales,  hace parte del conocimiento humano, y por tanto es un deber acercar los resultados de los proceso investigativos a las comunidades y cultura de donde emergen.