Huellas de progreso es una instalación artística que aborda la relación entre el ser humano y el río Bogotá, destacando cómo los avances sociales, tecnológicos e industriales han generado una desconexión entre las personas y la naturaleza, lo que ha llevado a serios problemas ambientales. Debido a la explotación de recursos, la contaminación y un exceso de producción y consumo, la evolución humana ha tenido un impacto negativo en el medio ambiente.

El proyecto artístico incluye tres elementos: toma de fotografías, videos y objetos recolectados a lo largo de los 375 kilómetros del río, los cuales están dispuestos en 16 puntos geográficos establecidos según los criterios de color y forma del agua. Explorar el río Bogotá se convierte en una herramienta crítica para observar, sentir y comprender el paisaje. Esta instalación nos lleva a un viaje crítico a lo largo del río, invitándonos a reflexionar sobre la influencia del ser humano en su entorno y las consecuencias ambientales.
A lo largo de la historia, el progreso humano ha llevado a una transformación del medio ambiente, con un aumento en la urbanización, la contaminación y la explotación de recursos naturales. La Revolución Industrial intensificó estos problemas, marcando una desconexión aún más profunda entre la humanidad y la naturaleza.

En el caso específico del río Bogotá, se evidencian las consecuencias de este progreso desenfrenado. La expansión industrial y el crecimiento urbano han resultado en una crisis ambiental, con una explotación irresponsable de los recursos y una contaminación alarmante. Esta relación entre el ser humano y la naturaleza se refleja en la contaminación del río. En Colombia, el agua es especialmente valiosa, representando vida, desarrollo y tradiciones culturales, pero también enfrenta amenazas como el cambio climático y la contaminación.

El propósito de esta investigación es explorar estas conexiones entre el río Bogotá y la humanidad, proporcionando al espectador herramientas para comprender y expresar el territorio de manera subjetiva. La deriva, como práctica estética, permite explorar y entender el espacio como un territorio habitado, revelando puntos donde la desconexión con la naturaleza es más evidente.

«Huellas de Progreso» busca aportar una mirada crítica sobre la problemática ambiental que afecta al río Bogotá, a través de la creación de una instalación artística, fomentando la reflexión acerca de los efectos ambientales que se producen en el río, tomando en cuenta la relación entre este y las comunidades ribereñas.