El trabajo corresponde a una serie de cinco dibujos realizado con tinta china sobre papel sus dimensiones son 25x25cm elaborada en el año 2020 como secuencia de la serie Aposematica del 2019. Los dibujos representan los ojos de distintos insectos; una polilla, mariposa, abeja, libélula y mosca, por medio de distintas texturas y una propuesta de efecto óptico en los ojos de los insectos. La cual continua la construcción teórica del territorio desde el código o filtro a manera de ventana que impone la pantalla en los procesos de comunicación humanos. Su exposición esta pensada como una secuencia que exponga los cinco dibujos en serie para que el tamaño de los ojos y su diseño logre captar la atención de quien observa y se sumerja en el problema de la mirada que desea abordar el trabajo.
Con Territorio código como sustento teórico del trabajo Aposematica relaciona el lugar con el hecho de habitar un espacio se suma la pantalla a modo de metáfora cuestionando el espacio desde lo tangible y lo virtual. Trabaja en torno al filtro que genera la pantalla frente a lo que denominamos realidad e indaga sobre el poder de la pantalla como promotor de la vista homogénea en la sociedad del espectáculo en su característica de efímera, lo inmediata. Se persigue entonces una visión crítica y el desvendar desde el poder en conocer el entorno y el estudio de la subjetividad.
Como soporte se recurre al Mito de la desterritorialización, texto en el que Haesbaert profundiza sobre los procesos de desterritorialización pues su tesis radica en que no es posible desprenderse del territorio; esto es una ilusión o un estado de tránsito (2011). También fabrica sus cimientos en el escrito la sociedad del espectáculo de Debord (1967) quien sumerge su trabajo en una sociedad de la representación, para la cual se puede decir que es ahora la pantalla lo que consigue en gran medida su difusión, y el texto la pantalla total de García (2011), pues ella realiza un acercamiento del concepto pantalla al cuestionar artístico refutando que esta sea solamente un soporte para la imagen, sino que le atribuye connotaciones propias.
La pantalla es una metáfora sobre el intermediario en el proceso de comunicación, así emisor y receptor se exponen a un filtro a una ventana que representa un fragmento de la escena y reprime la información. Parece que las utopías y los deseos colectivos se fueran desplazado a las pantallas, generando un estado de hipnosis. Se alude de tal modo a un posible tráfico de identidades problema del percibir pues se propone una reflexión sobre el tiempo en su relación con el espacio.
Como soporte se recurre al Mito de la desterritorialización, texto en el que Haesbaert profundiza sobre los procesos de desterritorialización pues su tesis radica en que no es posible desprenderse del territorio; esto es una ilusión o un estado de tránsito (2011). También fabrica sus cimientos en el escrito la sociedad del espectáculo de Debord (1967) quien sumerge su trabajo en una sociedad de la representación, para la cual se puede decir que es ahora la pantalla lo que consigue en gran medida su difusión, y el texto la pantalla total de García (2011), pues ella realiza un acercamiento del concepto pantalla al cuestionar artístico refutando que esta sea solamente un soporte para la imagen, sino que le atribuye connotaciones propias.
La pantalla es una metáfora sobre el intermediario en el proceso de comunicación, así emisor y receptor se exponen a un filtro a una ventana que representa un fragmento de la escena y reprime la información. Parece que las utopías y los deseos colectivos se fueran desplazado a las pantallas, generando un estado de hipnosis. Se alude de tal modo a un posible tráfico de identidades problema del percibir pues se propone una reflexión sobre el tiempo en su relación con el espacio.
Andrea Valentina Diaz Medina
Proyecto de investigación: Aconteceres territoriales.
Institución: Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia.
Grupo de investigación: Creación y Pedagogía.
Semillero de investigación: Historias Disecadas.