La tradición oral como un elemento esencial en la preservación de la memoria colectiva y la construcción de la identidad cultural, actúa como el puente que une el pasado con el presente, manteniendo viva la historia y la herencia de una sociedad a pesar de las inevitables rupturas y fragmentaciones que ocurren a lo largo del tiempo.

El propósito central de esta obra de investigación creación gravita en torno a la fragilidad de las expresiones orales, especialmente los refranes y dichos populares presentes en el lenguaje cotidiano, los cuales actúan como vehículos de sabiduría y cultura que se transmiten de una generación a otra en la región del altiplano cundiboyacense, indagando a su vez sobre la vulnerabilidad de estas formas particulares del habla y su debilitamiento a medida que la sociedad avanza. Este proyecto de investigación-creación es una obra de videoinstalación que explora la intervención artística de una vasija de barro fragmentada como artefacto material para representar el aspecto inmaterial del habla y luego reparada con cintas las cuales tienen escritos refranes y dichos, esta reparación hecha con cintas que pueden desprenderse con el tiempo, no busca mantener la obra intacta de manera permanente, sino que destaca la naturaleza transitoria y cambiante de la tradición oral, representando la idea de que las expresiones culturales están sujetas a la erosión del tiempo y a los cambios socioculturales, de forma que se fusiona la apropiación material siendo las vasijas de barro símbolos tangibles de la rica tradición alfarera de la zona y conceptual en cuanto a la representación de la fragilidad de la tradición oral cundiboyacense.