La maternidad ha sido asociada a lo femenino, por lo que la palabra ‘mujer’ está ligada al hecho de ser madre. Desde el nacimiento la condición biológica es determinante en la distribución de las tareas y los roles; la sociedad estructura el modelo de organización social basado en el género, jerarquiza la diferencia sexual en una relación asimétrica de poder, lo que genera desigualdad y discriminación. La desigualdad de género invalida la capacidad de la mujer para tomar decisiones sobre su cuerpo, su sexualidad y su reproducción y al mismo tiempo la discrimina al no asegurar su acceso a educación sexual y reproductiva. Los roles de género y los estereotipos contribuyen a considerar a la maternidad como una función natural, un don de dios o la más alta aspiración femenina. Aunque las mujeres comparten atributos similares, sus características individuales y sus contextos las hace diversas, por lo que sus experiencias de embarazo y maternidad son subjetivas.

La obra aborda las generalidades de la maternidad partiendo de mi experiencia personal, para luego indagar sobre las maternidades de otras mujeres. La perspectiva tanto inductiva como experimental del proyecto me permitió ir de lo particular a lo general mediante la observación, la experimentación y la generalización, mientras que la combinación de la teoría, la práctica y la reflexión, junto con la exploración de los diferentes materiales y técnicas, me permitió la creación de nuevo conocimiento expresado de manera poética a través del arte y sus lenguajes.

La obra se compone de tres piezas escultóricas de arte textil tejidas a mano. La pieza no. 1 es un conjunto de doce piezas de 20 cm de ancho x 20 cm de alto x 110 cm de largo cada una. El arreglo de las piezas tiene dimensiones variables. La pieza no. 2 consistente en una rama de árbol con piezas tejidas a mano en sus ramas mide 220 cm de alto, 140 cm de ancho y 90 cm de largo. La pieza no. 3 mide 290 cm de alto, 50 cm de ancho en la parte media y 150 cm de diámetro en la parte inferior.